Historia & Experiencia Personal
EXPERIENCIA PERSONAL:
Estaba en la cama...no conseguía conciliar el sueño...me sentía observado, pero por más que miraba por la habitación y las demás partes de la casa, no había absolutamente nadie. Mis padres estaban durmiendo en su habitación, y mi hermana en la suya, pero yo seguía con esa sensación de que había alguien conmigo en mi habitación...
Al poco tiempo el cansancio pudo conmigo, y conseguí dormirme, pero no lo bastante profundamente como para escuchar aquel ruido junto a la silla de mi habitación. Abrí los ojos de repente y vi una extraña y distorsionada figura... Asustado, sudando, encendí la lámpara que había junto a mi cama, pero la figura había desaparecido... Tal vez sólo fue mi imaginación, pero parecía tan real...
No conseguí dormir en toda la noche. Estuve alerta por si volvía a aparecer la figura, pero no fue así.
Al día siguiente todo iba perfectamente...perfectamente hasta que llegó la hora de irse a la cama...la misma rutina de siempre: mis padres a su habitación y mi hermana a la suya...me quedé de nuevo solo en mi habitación, y ese día fue agotador, así que decidí intentar olvidar todo lo ocurrido la noche anterior e irme a dormir...
Todo iba bien, hasta que surgió la necesidad de ir al baño...
Fui, y no había nada, tan solo oscuridad... Encendí la luz y...NADA...mi reflejo en el espejo del baño...
Le di la espalda a la puerta, dado el lugar que ocupaba el retrete en el minúsculo cuarto de baño...
De repente, sentí como si una extraña presencia pasaba por detrás de mí, pasando de largo del baño y dirigiéndose a la cocina..
Me asomé al pasillo sin salir del baño y vi que la luz de la cocina estaba encendida...
Lo primero que pensé fue que sería mi hermana, mi padre o mi madre, que se habían levantado para algo...
Asustado, me acerqué a la puerta de la cocina, pero allí no había nadie...estaba completamente vacía...la ventana estaba abierta, y corría un viento helado, algo extraño en pleno mes de julio...
El miedo de no encontrar nadie en aquella cocina en la que la luz se encendió misteriosamente pudo conmigo, y me fue corriendo hacia mi habitación... Me quedé en vela toda la noche...
Al despertar al día siguiente, aún tenía la esperanza de que fuese algún miembro de mi familia quién fue a la cocina y tal vez se dejara la luz encendida tras volver a su habitación, así que pregunté a mis padres y a mi hermana...pero nada...nadie se había levantado aquella noche...
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HISTORIA: 3:15 h
Se cuenta que por las 3’15 de la madrugada es cuando las almas en pena (es decir, los que están muertos pero sus almas siguen vivas) salen de sus escondites y se pasean por las casas de noche para mostrar su sufrimiento. La gente no las ve, porque está durmiendo. Pero si alguien las llegase a ver, se quedaría paralizado para siempre, viendo, sintiendo y escuchando pero sin poder moverse. Eso es lo que le sucedió a Marya, una chica de trece años. Era una noche que no lograba dormirse, y entonces decidió ir a tomarse un vaso de leche. Pero no pudo llegar más allá del pasillo, ya que “algo” misterioso la obligó a quedarse quieta, sin moverse. Entonces vio una silueta de mujer con el rostro muy triste, que lloraba desconsoladamente. Era transparente, y parecía de cristal. La mujer tocó a Marya con sus delicados dedos, y entonces la chica dejó de respirar. Lentamente, cayó en el suelo como una escultura de metal. Sus padres, cuando la encontraron, no se explicaban la extraña muerte de su hija.
Por eso es necesario no despertarse nunca a las 3’15. Si te despiertas y ves que en el reloj pone las 3’15, mi consejo es que te vuelvas a dormir enseguida. No salgas para nada de la cama, no abras los ojos. Quédate dormido. Es mi consejo
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